viernes, 15 de julio de 2011

CRISIS



Estaba recordando la imagen de la Torre del Tarot, que representa el fuego que destruye, purifica y libera.
Se queman energías y patrones caducos, y me atrevería a asegurar que causa una revolución, más allá del simple cambio, pues todo se transforma desde los cimientos, radical, violenta y dolorosamente. Es un cliclo lleno de incertidumbre y además necesario para el crecimiento, el aprendizaje y nuestra evolución.
Así como la tierra es preparada para la próxima siembra, se quema lo que ya sirvió a su propósito y se remueve la tierra para que tome nuevos aires. Técnicamente se dice "ni las mejores plantas, ni los mejores fertilizantes, producirán los mejores resultados si no tienen un suelo sano o tienen un drenaje malo, o un pH bajo o elevado (...)".
Es más, la crisis o revolución ocurre cuando corresponde, ni antes ni después. Al igual que los ciclos de la naturaleza, todo tiene su tiempo (aunque los seres humanos ya casi no reconocemos los ciclos naturales debido a la disarmónica manipulación que hemos ejercido sobre nuestro amado hogar).
Así, la crisis abre una puerta para ver y desarrollar nuestros potenciales. La oportunidad para sacar lo mejor de nosotros, lo que nos hace distintos a tantos seres, las grandezas que sólo tenemos los seres humanos.
Es un paso más recorrido en el camino para despertar del sueño a una nueva y mejor realidad...como el ave fénix que renace de las cenizas en toda su gloria.

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